El verdadero objetivo de esta columna, en esta ocasión, es comentar sobre algunas diferencias entre el pensamiento de un joven y el de un adulto. Ya que un joven actúa y habla según su impulso entrelazado con sus emociones y el adulto lo hace (a demás de lo anterior) a base del resultado de la experiencia… Esto es un análisis basado en la reflexión y la observación. No es una crítica. Aclarado lo anterior, a rajar ocote….
¿Qué opinan sobre el progreso de otros países? ¿Qué haría usted para contribuir a un avance similar?, así decía la pregunta que hizo un adolecente por medio del Facebook. Las interrogantes captaron toda mi atención al ver que se refería a una fotografía similar a la que muestro más abajo. Cuando leí las preguntas por primera vez, inmediatamente pensé cómo debería responder, pero al leerlas por segunda vez, me pregunté: ¿Es verdaderamente un adelanto social? En mi opinión, progreso es cuando la acción nos lleva a mejorar nuestra calidad de vida, a una superación que denote comodidad o por lo menos estabilidad, por ejemplo, económica. O un descubrimiento científico, de una nueva medicina, un invento por medio del ingenio humano…
En referencia a la foto, el joven piensa que los niños al besarse a temprana edad demuestra un adelanto para la humanidad. Y es una crasa equivocación porque besar es una necesidad biológica, no como comer o tomar agua, pero se debe hacer con responsabilidad, placer, costumbre o amor…. Es cierto que no hay edad, sin embargo, es ilógico pensar que la práctica antes de los 7 años es correcta. Antes de esa edad, yo no recuerdo nada de mi infancia. Cualquier joven pensará que es un juego de niños y en efecto puede ser una acción inocente de parte de los infantes ya que besar es parte del proceso del reconocimiento de nuestro cuerpo sobre las reacciones al estímulo por medio del sentido del tacto. Pero no para decir que es parte del progreso de un país. ¿Qué pasaría si el ser humano empezaría a procrear hijos a la edad que físicamente lo pueda hacer?, sin estar preparada para enfrentar la vida en cualquier ámbito, sin capacidad y sin tener los medios para su subsistencia y sin decisión absoluta para tomar los fallos correctos. Esto nos llevaría más al subdesarrollo, a un cataclismo, a un desastre, caeríamos al abismo del atraso social. Niños cuidando niños.
Desde el punto de vista de un joven es bien aplaudida dicha actividad, enfocándose erróneamente que es un avance para la humanidad. La pregunta del millón entonces es: ¿Cuando ya sean padres pensarán lo mismo? Claro que no. El enfoque del pensamiento será circunscrito según su estado y pensando en el bienestar familiar…
A quí está el debate el pensamiento de los padres y el de los jóvenes. Para el joven esto representa un juego de niños y para el adulto ya es una anormalidad, falta de respeto y un tema difícil. Es no tener valores morales. Es no seguir con los cánones de una conducta paternal en sumisa disciplina.
Enfocándonos sobre la foto del inicio en esta columna, podremos decir que los padres del niño diría que la acción que ejecuta su retoño es normal, es correcta, es lógica, es natural... que no tiene nada de malo… Pero, ¿Qué diría los papás de la niña? Aquí es donde la cosa se pone peliaguda. ¿Quizás por eso muchos padres preferirían que su descendencia fueran sólo niños?
Concluyendo el tema, los jóvenes que comentaron en el Facebook (menos uno de ellos) se limitaron a dar respuestas simples, creo que por no entender o no saber dar un comentario al respecto. Aprovechando la oportunidad, insto a los niños y adolecentes a obedecer los consejos de sus padres para no cometer tantos errores en la vida que trae consecuencias lamentables… ¿Y usted qué opina?
Autor: Luis Xalin.
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