En esta oportunidad solamente voy
a referirme a 3 problemas que afronta el magisterio rural.
Primero: (El personal educativo)
En la mayoría de las escuelas el docente debe de ensenar a alumnos de dos o
tres grados al mismo tiempo y en un único salón. Lo que quiere decir que hay
que atender a más de 30 niños de diferentes edades y capacidades. Esto también
perjudica a los alumnos porque no pueden tener una enseñanza acorde al grado
que cursan. Tienen que adaptarse a la situación pues los maestros unen los
diferentes grados y a veces es más la dedicación que se les pone a unos que a
otros. Aunque una cosa si es cierta: cuando el alumno quiere aprender, sea como
sea, logrará el éxito. No como los que sólo llegan a ocupar un pupitre y sobre
todo, estorban a los demás. Con los maestros por contrato ese problema se está
resolviendo.
Una escuela para funcionar normal
y correctamente, en el área rural debería tener por lo menos 7 docentes, uno
para párvulos y los restantes para los 6 grados de la primaria. Lo lamentable
es que por no haber dinero en el estado no pueden presupuestar a todos o a más
maestros. Y lo que si hay que aplaudir es la valentía de los docentes que han
logrado sacar adelante a sus alumnos, teniendo a su cargo dos o tres grados.
Juntos.
Segundo: (La infraestructura
escolar) El estado en que se encuentran algunas escuelas es pésimo. No cuentan
con suficientes y amplios salones de clases. Otros no tienen suficientes
pupitres, mallas perimetrales, un buen techo, o todavía no tienen servicio de
energía eléctrica.
Tercero: (El acceso a las
escuelas) el transporte hacia el lugar de trabajo es un problema porque la
mayoría de los maestros en el área urbana. Antes en la escuelita donde yo
aprendí a hacer mis primeros garabatos, llegaban o regresaban por medio de
“jalones” porque a veces los dejaba la camioneta pasajera. Y cuando de verdad
sufrían era en el invierno. Y eso muchas veces se transformaba en su ausencia
en las clases. Pero ahora todo ha cambiado, y vemos como entre varios maestros
pagan el servicio de un microbús. Y ya no hay motivo para faltar por motivos
climatológicos.
Salvo alguno que otro “faltón” la
mayoría de admirables profesores rurales están al frente de sus aulas,
contribuyendo a la educación.
Autor Luis Xalin.
Publicado en la Revista
“Cotzumalguapa”, mayo 2004.
2 comentarios:
Esta demasoado bello luis! es una delicia leerte!
Wow.... cada dia me sorprendes más...
ere super mega increible...
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